Ahora que en casi todas las ciudades y pueblos se celebran las fiestas patronales o celebraciones veraniegas, es frecuente que, se den casos de quemaduras manipulando fuegos artificiales o a causa de que haya caído algún resto de los mismos.
Para prever este tipo de quemaduras es conveniente no estar cerca de los fuegos, no tocar nada relacionado con las mechas y no andar con fuego cerca de los mismos, por supuesto no se deben manipular si se es menor de edad, sobre todo los niños y en el caso de los adultos se ha ser muy diestro para manipular, lanzar y provocar la explosión que luego se ve en las fiestas.
Ojo también los pequeños petardos, pueden ocasionar sustos y en ocasiones algunas lesiones, principalmente cuidado con los ojos, cabeza y manos, en veranos casi todos estamos con los brazos y piernas al descubierto.
En caso de sufrir alguna lesión de este tipo los expertos recomiendan lavar la zona afectada con agua limpia, fría y sin jabón; no despegar o retirar de la herida parte de tela que pudiera esta adherida a la quemadura, una quemadura requiere de no manipulación, provocaríamos más dolor e inclusive infección, dependerá del grado de la misma.
Debemos pensar en su cicatrización y posibles complicaciones; lo más correcto es acudir al centro asistencial más cercano.
No aplicaremos grasas o pomadas ni líquidos, hasta llegar al centro sanitario se podrá cubrir la herida con apósitos estériles y secos, o bien dejándola al aire en el caso de no disponer de ellos. La asistencia sanitaria ha de ser inmediata.
Las lesiones relacionadas con los fuegos artificiales se suelen dar con mayor frecuencia en las manos y en los dedos, en los ojos, en la cabeza y en la cara.
Más de la mitad de las lesiones son quemaduras, cerca del 64%, el resto son contusiones, rasguños y laceraciones.
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