Del blog Fogonazos. es.
“Tiene usted mala cara, señor Martínez”. Imagina que te levantas de la cama, te diriges al baño y cuando te pones delante del lavabo el espejo revisa tus constantes vitales y realiza un diagnóstico de tu estado de salud esa mañana. La imagen la hemos visto en muchas películas, pero empieza a ser una realidad gracias a trabajos como el del estudiante del MIT, Ming-Zher Poh.
Básicamente el espejo tiene una cámara digital, un ordenador que recoge todos los datos y un software que los interpreta. La cámara analiza la cara del usuario, la temperatura, el pulso, la respiración y mantiene un registro diario de tus constantes vitales que puedes ver mientras te peinas.
Lo que se hace con esta técnica es medir las variaciones de luz sobre la piel para calcular cuándo está fluyendo la sangre, de modo que se puede establecer el ritmo cardíaco. Hasta ahora, este sistema es caro y complejo, pero este grupo de investigadores del MIT ha realizado los cálculos para ponerlo en práctica con una sencilla webcam y simplificarlo.
2 comentarios:
Avanzamos a pasos agigantados en esa direcciòn...otra cosa es que no queramos darnos cuenta....
Ya nos damos cuenta, claro que si, aunque no tomos remamos y vamos en la misma dirección.
Gracias y saludos.
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