No siempre podemos comer de todo, en ocasiones, lo que resulta saludable para algunos para otros puede provocar una repuesta anómala, se les llama intolerancia alimentaria y no siempre son fruto de reacciones alérgicas.
La más común y la más conocida es a la lactosa, pero no es la única, el tratamiento más eficaz es no ingerir este tipo de alimentos. No obstante, ante la sospecha de que algo sienta mal o provoca molestias se debe acudir al médico,jamás automedicarse.
La intolerancia está relacionada con la respuesta del sistema inmunitario a determinados componentes que contienen los alimentos y que son los que provocan los síntomas del malestar.
Los principales alimentos son: Frutos secos, marisco y frutas, también pueden ser huevos, soja, pescado, tomates,leche o maíz entre otros productos, en caso de sentir reacciones adversas o malestar, el médico será el que indicará la remisión al especialista, el alergólogo hará el estudio pertinente.
¿Qué tipo de reacciones ocasionan?, pueden emitir síntomas abdominales, meteorismo, dolor abdominal, diarreas, alteración en general del ritmo intestinal……….., en algunos casos hasta alteraciones analíticas, sistemas respiratorios, dermatológicos o reumatológicos. Todo ello nos indica que se debe obviar los alimentos que producen intolerancia en el organismo.
La intolerancia más frecuente es la reacción a la azúcar de los lácteos, conocida como lactosa, se deben tener en cuenta los productos lácteos incluso en los niños, ante cualquier síntoma se debe consultar y/o acudir al médico.
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